Artroscopía
¿Qué es la artroscopía?
La artroscopia es un tipo de cirugía mínimamente invasiva y avanzada que permite solucionar ciertos problemas de una articulación, una recuperación más rápida y un resultado estético más favorable.
El artroscopio, un instrumento óptico que se introduce en la articulación a través de una pequeña herida. La imagen obtenida se transmite a través de una pequeña cámara a un monitor de televisión, permitiendo al cirujano examinar la articulación y realizar el tratamiento de la lesión.
Si usted presenta en una articulación dolor continuo, bloqueos, inflamación o luxación, la ortoscopía puede ayudarle a solucionar estos problemas.
Las articulaciones en las que más frecuentemente se realiza la cirugía artroscópica son la rodilla y el hombro. En menor frecuencia tobillo, cadera.
En general, muchos de los procedimientos artroscópicos se pueden realizar de forma ambulatoria, siendo dado de alta el paciente el mismo día de la intervención, dependiendo del caso en particular puede ser necesario el ingreso durante uno o más días.
La recuperación después de una artroscopía es más rápida que la recuperación tras cirugía convencional. Sin embargo, es necesario realizar ejercicios de rehabilitación que ayudarán a la cicatrización de los tejidos y a una recuperación completa.
En la actualidad, la artroscopía es uno de los procedimientos , mas seguros y fiables para el paciente. Sin embargo, como todo procedimiento quirúrgico puede presentar complicaciones, aunque éstas se presenten con una incidencia muy baja.